Susie y Peter deben admitirlo: la casa a la que se han trasladado es verdaderamente increíble, su habitación es enorme y el jardín espléndido. Pero, de repente, llegan ruidos extraños desde la buhardilla... ¿Será el viento, que no para de ulular ni un instante? ¿O tal vez será un animal? Una noche, los dos hermanos son despertados por un batacazo. Cuando abren los ojos, descubren que en la parte del techo que hay sobre sus camas ha aparecido una trampilla. ¡Qué extraño! No recordaban haberla visto la primera noche...